
El tipaje linfocitario es una herramienta de diagnóstico que proporciona una imagen del sistema inmunitario del paciente en un momento dado y que aporta elementos relacionados con la inmunidad adaptativa, gracias a la cuantificación de diferentes subpoblaciones linfocitarias en la sangre.
Resulta muy útil para detectar alteraciones inmunitarias, implicadas en numerosas enfermedades. Sirve para detectar infecciones víricas, patologías crónicas, autoinmunes, inflamatorias y cancerosas.