Hay días en que el cuerpo susurra, pidiendo un abrazo cálido desde dentro. Quizás después de un esfuerzo noble, o simplemente cuando el mundo exterior nos exige un extra. En esos momentos, volvemos a la tierra, a sus frutos más humildes pero más poderosos. Esta no es una simple sopa de garbanzos; es un elixir ancestral, una sinfonía de la naturaleza cocinada a fuego lento, diseñada para enraizarte, calentar tu esencia y nutrir cada célula desde la sabiduría de eras pasadas. Es el abrazo que tu ser profundo estaba esperando.
Ingredientes:
- 200 grs de garbanzos cocidos y pelados (recuerda que siempre se tienen que pelar)
- 1 cebolla
- 1 ajo
- 300g de calabaza cortada en dados
- 1 patata mediana cortada en dados
- 250 gramos de tomate natural triturado
- 2 hojas de laurel
- 1½ cucharadita de cúrcuma
- ½ cucharadita de garam masala
- 1 cucharadita de pimentón picante
- 25 grs de fideos de espelta
- 3 cucharadas de perejil
- 2,51 de agua
- aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharada de harina de garbanzo (opcional)
Preparación:
- Cuece los garbanzos con un par de hojas de laurel y media cucharada de semillas de comino. Guarda el agua de la cocción, necesitarás más o menos 1 litro.
- En una olla calienta el aceite y sofríe la cebolla, el ajo y el resto de especias.
- Añade los garbanzos cocidos con el agua de cocción (1 litro más o menos), el tomate, la calabaza y la patata. Cuece 20 minutos a fuego lento. Si quieres una sopa más caldosa puedes añadir algo más de agua y si te apetece más espesa puedes añadirle una cucharada de harina de garbanzo.
- Añade los fideos y deja cocer 5 minutos. Al apagar añade el perejil y lo dejas reposar 5 minutos.
- Remover, servir y disfrutar.
Al remover esta sopa, sientes la densidad de los garbanzos que te conectan con la tierra, la calidez de las especias que encienden tu fuego interno, y la suavidad de la calabaza y la patata que calman y nutren. Cada ingrediente ha cumplido su ciclo, entregando su energía vital para convertirse en un bálsamo para tu ser. Sirve con gratitud, inhala su aroma curativo, y permítete recibir esta nutrición profunda. Es un acto de amor propio, un ritual sagrado en tu día.
Te invito a experimentar la magia de esta sopa en tu propia cocina. Prepárala con intención, saboreala con consciencia, y siente cómo te revitaliza desde dentro. Si esta receta resonó contigo y deseas seguir explorando cómo la nutrición ancestral puede transformar tu bienestar, te abro las puertas de mi espacio donde comparto más secretos de Ayurveda, MTC y Nutrición Ortomolecular. Deja un comentario contándome qué tal te fue, o simplemente envía una señal al universo si sentiste la conexión. Tu camino de nutrición consciente continúa… y estoy aquí para acompañarte.
Muchas gracias,
Bendiciones,
Deseo que te guste. Y recuerda:
El verdadero cambio empieza desde el interior.

